Mi Mocha

Nunca antes me dí cuenta de lo divertido que puede ser tomar café...hasta hace algunos días...hasta hoy. De haberlo sabido,la vida habría sido más divertida a cada taza,cada una...y una más.

Siempre creí que el café era para aliviar las penas...esas "kinda love",ya saben. Pensé que era para hacerse el interesante...el intelectual,el hipster o al menos hay gente que lo hace ver así; Yo no,a mi sí me gusta disfrutar un buen café,acompañado de un buen cigarrillo y grata compañía,aunque la compañía sea uno mismo y nadie más.

Aunque debo confesar que el café sirve como una deliciosa distracción,te disipa de esas charlas banales y absurdas de personas absurdas,vacías; Así mientras la gente estúpida trata de convencerte de cosas imposibles o pendejas(cómo ellas),puedes perderte en la inmensidad tan satisfactoria de una minúscula taza de café,escuchando el incesable "bla bla bla"...una y otra...y otra vez...y una más.

Otras veces,muchas otras,sin importar que tan amargo o insípido sea el mismo,se convierte en el compañero perfecto para esas charlas de vida,de amistad,de amor...de amor. Se convierte en el sorbo de valor que hace falta para mirar a los ojos a la mujer que amas y decir...bueno,mirarla a los ojos,la verdad es que nunca he sabido que decir; Siempre que he dicho algo,pienso inmediatamente que pude haber dicho algo más interesante...más apropiado.

Sin embargo,tan noble puede ser el cafecito,cómo desdichado y doble filo.¿ Después de qué maldita y deliciosa taza me volví su amigo?,¡¡mierda!!,¿la cuarta...la quinta?,nah...mejor no hablar de eso,no me dan ganas. Mejor invito a mis amigas y amigos un café...y pido mi Mocha,a fin de cuentas,what the fuck...